Experimenta esa emoción maravillosa de ver que
empiezan a llegar sus ganancias.
Observa satisfecho que ahora tiene un buen producto o servicio que ayuda a un determinado
grupo de personas a satisfacer una
necesidad concreta, ya sea de información, curiosidad o entretenimiento, o a
resolver algún problema específico.
Esta orgulloso de si mismo, sabe que fue capaz de crear un buen negocio en Internet, un
sistema de seguimiento y una carta de ventas que... ¡Funcionan!
Ahora sabe como
promoverse y como lograr que los interesados en su producto lleguen por montones y sus listas al igual que sus
ventas crezcan, poco a poco pero constantemente.
El dinero empieza a llegar, primero será a
cuenta gotas, pero intuye con alegría que es cuestión de un poco de tiempo,
quizás de afinar algunos detalles para abrir por completo la llave del grifo y
que sus ganancias empecen a correr como si fueran un río.
Sentirá el impulso de festejar, de compra muchas
cosas que desea y de empezar a disfrutar de sus ganancias pero…
Cuidado!
También es el momento de ahorrar algo de lo ganado para
estar en posibilidad de darle a su negocio un buen mantenimiento, mejorarlo,
hacerlo crecer, o de invertir en nuevos proyectos que apuntalen sus ingresos de
forma tal, que aseguren un crecimiento sostenido.
Para esto, es conveniente elegir una buena institución
financiera para depositar su dinero, y que mejor que un banco como Sabadell, que le ofrece la posibilidad de obtener un rendimiento atractivo y seguridad en su
capital, además de hacer factible el acceso en línea, en el momento que lo desee, a su cuenta e información, así como realizar con certeza, operaciones y depósitos online.
Diana Reyes
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